Durante el helenismo se produce una tensión entre los cambios históricos, políticos y sociales acontecidos (victoria de los macedonios, establecimiento de reinos y circulación de mujeres poderosas) y el pasado que quedó atrás, pero que continúa como anclaje cultural, literario y lingüístico. En Alejandría, los poetas se encargan de ordenar la tradición previa en la Biblioteca mientras abrevan de ella y ajustan sus obras literarias a las condiciones vigentes. De esta forma, en el contexto alejandrino se incorporan representaciones que en otro momento habrían implicado alteridad, como lo femenino y lo extranjero. Apolonio de Rodas, director de la Biblioteca, reversiona el mito de los Argonautas y, en su epopeya, extiende los límites de lo admisible respecto de ciertas figuras femeninas foráneas. Las lemnias, que luchan y trabajan la tierra en lugar de tejer, se unen con los Argonautas para tener descendencia; Medea, por ser hechicera, obtiene junto al héroe el vellocino; Circe purifica a Jasón y a su sobrina por el crimen de Apsirto y posibilita su nóstos. El presente proyecto propone analizar las nuevas representaciones alejandrinas de lo femenino y lo foráneo en Argonáuticas a partir de las figuras de las lemnias, Medea y Circe.